En 1831 fue aislado por primera vez el estireno, un líquido incoloro procedente de una corteza de árbol. En 1930 el poliestireno fue sinterizado por primera vez a nivel industrial y a partir del estireno producido del petróleo, en un proceso químico llamado polimerización en el que las moléculas de estireno se juntan en cadenas y forman una sustancia sólida.En la década de los 50, la sociedad alemana BASF desarrolló e inició la producción de un nuevo producto: el poliestireno expandido. Este producto empezó a comercializarse bajo la marca Styropor . Aquí nació el típico corcho blanco a base de bolas que familiarmente hemos nombrado porexpan o techopan y que ha servido igual para embalaje que para construcción o también para llenar de nieve nuestros belenes.FABRICACIÓN
Las fabricas de EPS parten de unas pequeñas perlas vítreas de poliestireno expandible que inicialmente son pre-expandidas. En otro proceso, después de un tiempo de reposo y maduración, se les aporta energía y el pentano contenido en las perlas plásticas se dilata y el poliestireno por su parte se ablanda. Estas dos situaciones simultaneas expanden por una parte las perlas y por otra las suelda. Una vez conseguido el molde que conocemos en el mercado, el pentano se difunde hacia el exterior de las celdillas microscópicas y se sustituye por aire.RODUCTOSEl EPS puede fabricarse en grandes bloques que luego se cortan a planchas y pequeños moldes, normalmente personalizados a las necesidades de los clientes.A partir de los grandes moldes se pueden obtener piezas planas o con formas simples que permiten ser cortadas longitudinalmente por un hilo de resistencia eléctrica. Los pequeños moldes suelen ser peesonalizados para cada cliente y pueden hacerse igual para cajas de pescado, como para aparatos electrónicos o cantoneras para muebles.Las densidades normalmente usadas son: 10, 15, 20, 30 kgs. /m3. Para moldes se suelen utilizar todas y para moldes, que necesitan resistencia, normalmente se producen con densidades mínimas de 20 kilos.USO:Aparte del uso en construcción, el poliestireno expandido se usa en embalaje para muchas aplicaciones, entre las que podemos destacar:
Alimentación: Para cajas de pescados y mariscos da máxima higiene y garantiza los niveles óptimos de protección térmica.
Frutas y verduras: Prolonga el estado de conservación
Productos lácteos.
Helados y pastelería.
Electrodomésticos e informática: A la adaptabilidad de los envases y embalajes de EPS hay que añadir el excelente comportamiento en la amortiguación de impactos.
Muebles: Protege de golpes y caída.
Herramientas y maquinaria
Componentes de automoción
Óptica, fotografía y aparatos de precisión.
Juguetes.
Horticultura y jardinería
En definitiva, es un producto de óptimas condiciones para el envase y embalaje ya que a su adaptabilidad añade su buen comportamiento amortiguando los golpes.
Fuente: ANAPE